Grifería termostática. ¡Qué placer!

Iniciamos nuestro día con una agenda llena de tareas y lo terminamos añadiéndole muchas más. Porque la vida moderna ya es suficientemente complicada, agradecemos todo gesto, objeto, producto o sistema que nos ayude a hacerla más fácil, simple, manejable. Porque a veces no prestamos atención a las pequeñas rutinas, al tiempo y a la energía que perdemos en nuestros movimientos más sencillos, hay innovaciones cuyos fabulosos beneficios pueden llegar a pasarnos desapercibidos. Una de ellas tiene que ver con el cotidiano gesto de ducharnos. Con esa rutina diaria de calibrar los grifos y dejar caer el agua hasta encontrar la temperatura idónea.

Innovación al servicio de hogares cada vez más prácticos y, no olvidemos, cada vez más comprometidos con la sostenibilidad, la grifería termostática acaba con una de las costumbres que más agua nos ha hecho desperdiciar: la de encontrar la temperatura perfecta antes de meternos en la bañera o en la ducha; y también pone punto y final a una de las sorpresas domésticas más desagradables porque… ¿Quién no se ha estremecido bajo el agua cuando alguien ha abierto un grifo en otro lado de la casa?

Con los grifos termostáticos se evitan las variaciones de temperatura cuando se abre otro grifo en el hogar, sin que la reducción de la presión altere uno de nuestros momentos más placenteros del día.

Disponibles en una gran variedad de modelos, los grifos termostáticos de Roca apuestan también por llevar la seguridad más allá al estar diseñados para que no puedas quemarte al contacto con el metal.

Porque el momento de la ducha es uno de los más placenteros del día, porque nuestro tiempo es oro y el agua un bien insustituible, hay muchas razones para decidirse por instalar una grifería como ésta.