Su estilo elegante y refinado transmite la serenidad y placidez de los ambientes clásicos de tiempos pasados. Diseñado por Marcello Cutino, sus proporciones son solemnes y sus detalles no tienen fecha de caducidad. Una colección sólida y cálida pensada para permanecer viva en el transcurso del tiempo.
Marcello Cutino y el sello de BCF son considerados hoy en día como una expresión del auténtico sello italiano.